Se sabe que en China, desde la época de la política del hijo único, muchos niños « fuera de la cuota » no tienen existencia legal ni oficial. También en Brasil, por diferentes motivos, casi 3 millones de personas, el 1,5% de la población brasileña, están « fuera del radar ». El acceso a la sanidad, la educación y los servicios administrativos en general se convierte entonces en un camino plagado de obstáculos, si no insuperable.